Semana 27 - Conoce a tu público

En el nuevo proyecto que estamos encarando, tenemos la intención de atraer a ñoños del cine y de lo que sea. No podemos apuntar al público de la Cosmopolitan porque claramente no pensamos como ellos. Al desarrollar un contenido, se vuelve primordial pensar en quién va a hacer el destinatario.Y si quiere que se contenido se difunda, pensar en lo que este destinatario ideal quiere es la clave.

Por ejemplo, yo tengo que escribir un cuento (que me está quedando novela). Y pienso en qué cosas podrían gustarle a este lector. En el contexto de nuestro proyecto, asumo que, cual receta, una base de futurismo, con 200 gr de espacio exterior, espolvoreada con personajes que viven al margen, una cucharada de alienígenas y un gobierno poco querible, podría funcionar. Diseño los personajes:

-León, el capitán, de 30 y tantos (tal vez, 36). Serio, un tanto solitario. La voz de mando, el estratega.

-Andrea, la mano derecha del capitán, de 32 años. La única con la que León tiene completa confianza. Rápida, inteligente.

-Maximiliano, el fiestero. 25 años, loco por las armas, pero realmente loco. También es el mecánico de la nave y a veces, piloto. Le gusta andar en cuero por la vida porque tiene buenos pectorales, y perdió la cuenta de todas las compañeras de cama que tuvo.

-Valeria, la más joven del grupo, con 20 años. Hermana de Maximiliano. Piloto, loca por las naves. Su padre, ingeniero, diseñó la nave que vuelan, y fue él quien enseñó a los hermanos todo sobre las embarcaciones. Vive peleando con Maximiliano, pero hacen un buen equipo de trabajo.

La nave, en sí, es un viejo cacharro, amplio, usado antiguamente como transporte de cargas, que el padre de Maximiliano y Valeria consiguió y modificó internamente, dándole más potencia y agregados a gustos personales (como por ejemplo, la posibilidad de reproducir música). Junto a Maximiliano, instalaron un lanzador de rayos en el lado derecho. Al tiempo de enseñar a sus hijos a pilotearla, el hombre murió, en un "accidente poco claro". Desde que la tripulación se subió a ella, la nave se usa para el tráfico de mercaderías.

A esto le sumamos una tierra destruída y un año que no empieza con el número 2. ¿Qué dicen? ¿Funcionará? Nunca escribí algo futurista, así que puede ser todo un desafío. Además, lo que más me motiva, es que es algo que sí o sí voy a tener que escribir, no hay tu tía. Si lo asumo, si es aceptado, mi responsabilidad es total. Tengo que estar a la altura de las circunstancias.